“La Ciudad de Paz”
Cuando
un bebito o un niño mueren, inmediatamente es llevado al precioso Reino de
Dios, pues el es una
¡Joya preciosa de Dios!
¡Joya preciosa de Dios!
...pero sus madres, sus padres sino se arrepienten de este terrible crimen que han cometido a través del aborto, no podrán escapar de la condenación, irán a sufrir al infierno por la eternidad, porque LA VIDA LE PERTENECE SOLO A DIOS
¡Si las madres que desprecian al fruto de sus entrañas, supieran el inmenso valor que Dios da a cada uno de ellos, y las consecuencias que traerá en sus vidas este horrendo crimen ¡Nunca atentarían contra sus hijos! Sino que esperarían con ansias su nacimiento para protegerlos con amor, así como sus madres las trajeron a ellas mismas al mundo...
¡ESTO ES UN HORRENDO CRIMEN!
¡Es en vida que tienen que arrepentirse a los pies de Jesús, implorando su misericordia, y no volver a hacerlo! Porque Dios reclamará a ellos por cada uno de sus hijos; pues ellos son su herencia. ¡Si las madres que desprecian al fruto de sus entrañas, supieran el inmenso valor que Dios da a cada uno de ellos, y las consecuencias que traerá en sus vidas este horrendo crimen ¡Nunca atentarían contra sus hijos! Sino que esperarían con ansias su nacimiento para protegerlos con amor, así como sus madres las trajeron a ellas mismas al mundo...
Pues cada VIDA, que late en sus entrañas es
de incalculable valor para Dios ¡ellos son sus Joyas preciosas!
¡Cada hijo es una Joya preciosa!
Rodeados de su inmenso amor, los bebitos abortados, van creciendo, y aprendiendo a amar a Jesús ...
...a valorar su sacrificio en la Cruz, para conquistar nuestra SALVACIÓN
Esto es lo que describe Marieta Davis, en su libro "Escenas más allá de la muerte" bellísimas escenas de cómo viven en el cielo los bebitos y los niños:
"...una luz, infinitamente superior a la que había en el templo, descendió de lo alto; y yo estaba impresionada con la presencia de un séquito de ángeles, en cuyo seno estaba...ese glorioso Ser iluminado, el Redentor.
"...una luz, infinitamente superior a la que había en el templo, descendió de lo alto; y yo estaba impresionada con la presencia de un séquito de ángeles, en cuyo seno estaba...ese glorioso Ser iluminado, el Redentor.
"Dejad a
los niños venir a mí y no se lo impidáis."
La emanación de ese Ser fue el
aliento de la vida. El templo lucía un nuevo aspecto. Como la escena estaba finalizando, los ángeles que lo asistieron tocaron los instrumentos de cuerda...
Movió su mano bondadosa como en la aprobación de lo
que los ángeles guardianes habían hecho; y todos se inclinaron...De repente,
la música, como el estruendo de muchas aguas, surgió de todos los templos de la gran ciudad. Y ...ese Ser, (supremo) con los que le habían
acompañado, ascendió,
... "Si los hombres en el cuerpo
supieran la bondad de Dios en la redención, y dejaran el mal, y aprendieran la
justicia y los caminos de la paz.
Y ahora vi
que él es todo y en todos; la fuente de toda paz y alegría santa, y el tema de
todo lo que se me había sido permitido ver en el mundo de los espíritus.
....ahora se acerca una escena en la que debo ser
testigo solo de la recepción de los bebés de la tierra. Al finalizar (esta escena), vi por
encima y alrededor, ángeles elevados en el ambiente sereno, esperando con sus
tesoros el momento de llegar para entrar en el templo....La Ciudad de Paz
(Marietta Davis, es una joven que por la inmensa misericordia de Dios, fue llevada a conocer el precioso lugar, dentro del paraíso, llamada "La Ciudad de Paz", todas sus vivencias las describe en su libro "Escenas más allá de la muerte")
Gracias DIOS por el DON DE LA VIDA...
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