lunes, 25 de octubre de 2021

¡EL PARAISO! Yiye Avila

"Hubo una ocasión en que  luego del termino de una vigilia, orando, gimiendo, llorando...
 ...me recosté y sentí cuando me arrancaron y volé por el techo de mi casa para arriba y cuando vengo a ver estaba parado en un lugar 
¡De lo mas bello que yo jamás 
he visto en mi vida!
Yo miraba y veía tanta gente de blanco hablando unos con otros.
 Yo los veía, pero ellos no me podían mirar a mí, y yo sabía que estaba en 
"EL PARAISO"
 Y exclame ¡¡¡Señor!!!
¡Qué cosa linda ahí! 
Y hablaban y caminaban, y se movían vestiditos de blanco todos, con aquellos rostros de alegría,
 pero de pronto, se quedaron  ¡Todos quietos! ¡Miles de personas!
y señalaron para arriba
 y gritaron:
 Él  Señor venía  descendiendo de arriba... 
 …a estar un rato con ellos, 
¡A visitar su gente!

Después, cuando yo oraba por esa experiencia el Señor me decía: 

"Mi siervo es igualito, cuando Adán y Eva estaban en inocencia y estaban 
en el Jardín del Edén, un tipo del Paraíso 
 y yo descendía de arriba y estaba con ellos 
y tenía comunión con ellos, 
cuando pecaron se perdió la comunión" 

El pecado es como una pared que separa al hombre de Dios, por eso es que la Biblia dice que Dios no oye al pecador, y que él está de espalda a los pecadores...
 cuando el pecador acepta a CRISTO y su sangre lo limpia, queda de cara a Dios
 y el Señor le puede gritar: 
"¡Hijo mío! 
¡Gracias por entregarme tu corazón!"
 ¡Bendito sea el Señor Jesús!
 
Quiere decir que los que están en el paraíso, continuamente viene Dios ha visitarlos, y habla con ellos, y está ahí gozándose con ellos..." 
(Experiencia que Dios le dio a su siervo Yiye Avila en el Paraíso)